El ministerio de Defensa ruso denunció este domingo un ataque terrorista masivo con drones FPV contra aeródromos de aviación estratégica ubicados en cinco regiones del país: Múrmansk, Irkutsk, Ivánovo, Riazán y Amur.

Este ataque se produce en la víspera de la segunda ronda de conversaciones directas entre Rusia y Ucrania, prevista para este lunes 2 de junio en la ciudad de Estambul, añadiendo una tensa capa a los esfuerzos diplomáticos.

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De acuerdo con las autoridades rusas, si bien algunos ataques fueron repelidos y la cifra de aeronaves destruidas no corresponde a la que Ucrania afirmó, el golpe sí causó daños materiales significativos.

El ministerio de Defensa de Rusia reconoció la pérdida de equipos en los aeródromos de Olenia (Múrmansk) y Bélaya (Irkutsk), donde se reportaron incendios en varias unidades de aviación estratégica, incluyendo aviones Tu-95 y Tu-22M3. Afortunadamente, no se registraron víctimas entre el personal militar ni la población civil.

En el aeródromo de Olenia, región de Múrmansk, se registraron incendios en al menos cuatro aviones Tu-95. De manera similar, en el aeródromo de Bélaya, que alberga aviones Tu-22M3 y Tu-95MS, se observaron cinco columnas de humo, indicando impactos.

El ministerio informó que los ataques en las regiones de Ivánovo, Riazán y Amur fueron repelidos, y los drones fueron lanzados desde «un territorio situado en las inmediaciones de los aeródromos». Reportes iniciales sobre ataques en Severomorsk y Voskresensk fueron desmentidos, aclarando que las imágenes correspondían a las explosiones en Olenia.

A su vez, el gobernador de Irkutsk, Ígor Kóbzev, señaló que los drones ucranianos atacaron una unidad militar en la localidad de Sredni y daños en un edificio antiguo en Novomaltinsk. Indicó que por primera vez Siberia es objetivo de un ataque de este tipo y que los drones fueron lanzados desde un camión que ya fue bloqueado por las fuerzas de seguridad. En Riazán, un tejado de un edificio de viviendas resultó dañado por la metralla de un dron derribado.

Los servicios especiales ucranianos acompañaron el ataque con declaraciones oficiales, afirmando haber destruido «más de cuarenta» aviones de aviación estratégica, una cifra que Moscú desmiente categóricamente, aunque reconoce la sensibilidad del golpe.

Fuentes rusas señalaron que «el golpe resultó muy sensible, y afirmar lo contrario es un autoengaño que roza un sabotaje». También criticaron duramente la falta de protección de los aeródromos, la ausencia de sistemas de defensa antiaérea adecuados. La cartera de Defensa rusa confirmó que algunos de los participantes en los ataques terroristas han sido detenidos.

Rusia denunció además que desde el 20 de mayo, Ucrania intensificó sus ataques con drones y misiles contra infraestructuras civiles y la población en territorio ruso.

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